Este foro será una de mis maneras de compartir ideas de motivación e inspiración con el mundo.
Muchas de las ideas serán mías como resultado de mi experiencia en este maravilloso viaje que llamamos vida. Otras ideas vendrán de otros fuentes. Siento que de alguna forma las ideas en sí no pertenecen a nadie en particular sino al universo que las creó. Simplemente soy un vocero para que salgan. Aún así, siempre indicaré la fuente de cada idea cuando sea posible.
Seguramente, muchos notarán que español no es mi lengua materna. Por más que quiera que las ideas salen perfectamente bien y sin “horrores” ortográficos o de género, estoy seguro que algunos saldrán. Me encanta el castellano y la belleza de sus palabras y forma de expresión. Pido la comprensión de todos por cualquier error en la redacción de mis palabras. Me encanta dejar que fluya las ideas y mi objetivo es que de alugna alguna manera puedan influir positivamente en el día a día de las personas que las lean.
A veces en la vida estamos arriba y a veces estamos abajo. Lo más importante no es donde estemos en un momento determinado sino nuestra capacidad de rebotar por lo menos una vez más, porque…
¡Es el Rebote lo que nos Lleva al Tope!
~ Rob
Lo que no se hace en este momento puede quedarse en el olvido para siempre. Este instante es el mejor momento para realizar proyectos que sean fundamentales para nuestro progreso y nuestro desarrollo.
Ideas comunes abundan; mientras que las ideas realmente extraordinarias posiblemente llegan una sola vez. Podemos utilizar técnicas específicas para potenciar la energía del momento y así permitir que una idea florezca hasta convertirse en una propuesta espectacular. El día a día genera un sinfín de rutinas que obstaculizan momentos mágicos de la profunda inspiración.
Después de apreciar los frutos de esta idea, según va el cuento Schwab le pagó a Lee $25.000 dólares, que al comienzo del siglo XX, ¡era una suma extraordinaria!
En este maravilloso viaje que llamamos vida, diariamente la tentación nos provoca y juega con nuestras emociones. Nuestro nivel de control sobre esta determina nuestro éxito.
El secreto de lograr el éxito no consiste en el número de horas que trabajamos sino en nuestra efectividad mientras trabajamos. No es la cantidad sino la calidad lo que cuenta. Lamentablemente muchos establecen un vínculo entre el número de horas trabajadas y la productividad; cuando esto no es necesariamente cierto.
Por ejemplo podemos escoger el fin de semana más cercano a la luna llena para un retiro pleno de energía y entusiasmo y así lograr lo que para los demás es solo un sueño. Podemos encontrar un lugar lleno de magia y maravilla para pasar un momento agradable. Puede ser un parque, una montaña, una playa o simplemente un lugar cómodo donde podemos invertir tiempo en nosotros y en nuestro futuro. Cuando realicemos esta actividad, tomaremos las riendas de nuestro destino para no dejar nuestra dirección al azar de los vientos del tiempo.
El Encuentro Lunar para Potenciar la Mente puede ocurrir en cualquier lugar, en cualquier momento y con cualquier duración. Sugiero que sucede durante el fin de semana alrededor de la luna llena porque es más fácil de recordar. Lo único que hay que hacer es ver al cielo por la noche para ver cuando se va acercando. Apartar un fin de semana al mes ayuda a crear una continuidad y un camino sin interferir con el corre corre de todos los días.
La vida la podemos comparar muchos juegos competitivos como el fútbol, el baloncesto, el boxeo y el béisbol. Mientras que hay muchas similitudes, la principal diferencia es que no estamos jugando contra otro equipo u otro individuo, sino que estamos en una batalla constante con nosotros mismos y con nuestras emociones. Nuestra habilidad de controlar nuestros pensamientos y nuestra reacción a ellos en la competencia como en la vida determina nuestro éxito.
Algunos viven una vida llena de alegría y otros de angustia. La vida presenta diferentes desafíos para todos y no hay dos vidas que sean exactamente iguales. De la misma forma, no hay dos juegos que sean iguales. Durante este increíble viaje que llamamos vida, como en el juego, no son las circunstancias sino nuestra reacción a ellas que hace la diferencia.
Pensar en positivo suele ser el ademán de los directores técnicos y de los motivadores para lograr más efectividad. Mientras que esta es un elemento fundamental, no es suficiente para alcanzar todo lo que queremos. Además de pensar en positivo, debemos de estar en forma y preparados. Porque aún teniendo una excelente actitud, estando en forma y estando preparados, habrán veces cuando fracasamos.
Anotando un gol desde afuera, en la vida como también en el fútbol, es maravilloso y nos da mucho ánimo. Aún así, intentando anotar siempre desde lejos se presta a muchos fracasos que dificulta el mantener un buen ánimo para seguir adelante y persistir.
Todos estamos encaminados en un viaje maravilloso que llamamos vida. Estamos eternamente buscando la felicidad, el éxito y la razón del por qué nos encontramos en este planeta en este momento.
Si todo fuese así de fácil, llegaríamos al final de nuestra vida haciendo una sencilla suma. Al tener más momentos “positivos” que momentos “negativos” diríamos que tuvimos una vida plena. En realidad, medir la vida no es tan fácil. La vida no es cuadrada, no puede ser encajonada para luego decir que fue “buena” o “mala” en base a un número determinado de experiencias.
Si esperamos que todo sea, “bonito, bueno y barato,” durante nuestra aventura, lo más seguro es que estaremos desilusionados con el destino. Si, al contrario, aceptamos el hecho de que ocurrirán eventos que serán desagradables, podremos examinar nuestra reacción, respuesta y reflexión de ello en vez de enfrascarnos en la situación.
Podemos potenciar nuestro poder personal con el pensamiento. La experiencia de cada individuo determina el grado de confianza que se tiene y el poder personal impulsa el logro de sus objetivos.
Platón dijo:
Cuando dejamos sueltas las riendas del pensamiento y nuestras emociones toman control del camino, somos pasajeros en vez de conductores de nuestro destino. Para tomar control de nuestra dirección podemos cambiar nuestra forma de pensar hacia las circunstancias que se cruzan en nuestro camino constantemente. Si pensamos en que los acontecimientos son obstáculos inhibiéndonos el paso, quedaremos estancados. Al contrario si pensamos en lo ocurrido como un evento natural, conseguiremos soluciones definidas a los desafíos que dificultan el camino.
¿Ha reaccionado de una forma en la cual se sorprendió hasta usted mismo?
Reaccionar: Uso de un área dominante del pensamiento. Es el impulso que nos protege cuando hay peligro y se dispara inconscientemente.
