La tormenta de las dudas internas se calman confiando en quien eres. Con la confianza puedes conquistar las aguas turbulentas del descontento y convertirlas en remanso de paz.
El camino que recorremos es el resultado de los cosas pequeñas que hacemos día tras día. Cuando la pasión y el deseo dirigen nuestras acciones, la reaccion es positiva.