¡Hola querido amigo!
Desde que escuche tus ponencias en el IESA y compré tus libros siento mucha emoción cuando leo tus correos, casi siempre aparecen cuando más los necesito emocionalmente, gracias por tus maravillosas y alentadoras palabras, a veces cuando nadie está para animar o explicar algo, estás tú con reflexiones excelentes que solo son producto de la sabiduría que te da Dios para expresar y compartir tus vivencias …un fuerte abrazo sobreviviré como tú y tantos lo hacen…
Te aprecia
Laura Grau