La vida es una obra de arte en proceso. Podemos relacionarlo con un libro cuyas páginas se llenan con los acontecimientos de cada día. Los años son capítulos, los meses párrafos, los días oraciones y las horas palabras.
Tenemos el poder de escribir las palabras de cada momento y cada instante en nuestro propio libro. Nuestro carácter e inclusive nuestra apariencia se influyen por las palabras que escribimos cada día. Algunas páginas están llenas de aventura y alegría; otras con tragedia y tristeza.
Recorrer las vías del día a día se parece a una caminata por una librería. Las personas que vemos son como los libros en los estantes y las mesas de la librería. Cada libro causa una emoción distinta. Algunos son viejos amigos con tapas reconocidos. Cada vez que los pasamos, los abrimos y vemos que hay de nuevo escrito por las páginas. Otros nos atraen por sus tapas creativas e innovadoras, las cuales nos invitan a abrir y hojear sus páginas. Otros son una masa de colores y texturas que ni siquiera nos llaman la atención.
Cada individuo es un libro, una obra de arte en proceso. Los años, meses, días y horas forman el argumento del libro. Algunos de estos poseen dirección e intención; otros contienen palabras colocadas casualmente sin significado o sentido.
A veces la tapa de un libro nos llama la atención y al leer las páginas nos damos cuenta que es atractiva y a la vez sin contenido basado en nuestra experiencia. Las tapas de otros libros no son llamativas y sin embargo al leer sus páginas nos damos cuenta de la riqueza que ofrecen sus palabras y su sabiduría. Cuando encontramos un libro que nos atrae tanto en su aspecto físico como también en su contenido, se convierte en un amigo o en un compañero.
Acción es lo que define las palabras que escribimos en nuestras páginas cada día. Una vida llena de rutina y regularidad asegura un libro vacío y vacilante. Una vida llena de acción asegura un libro lleno de acontecimientos y aventura.
Tanto en lo bueno como en lo malo, la acción nos dirige a nuestro destino. Frecuentemente, no tomamos acción por miedo a fracasar. A veces la única manera de triunfar con el éxtasis de éxito es tropezar con el fracaso.
Vamos a tomar control de cada palabra, oración, párrafo y capítulo que forma parte de nuestra propia obra de arte. Tomemos acción hoy para energizar la experiencia que determinará nuestro destino y definirá el genio creativo que todos poseemos.
¡ Es el Rebote lo que nos Lleva al Tope!
∞ Rob McBride ∞
LL I 26