¿Te gusta cantar en la ducha?
¿Te parece que cantas bien?
Para muchos nos parece que estamos cantando bien cuando estamos en la ducha, hasta que alguien nos escucha y pregunta del otro lado de la puerta, si hay algún problema dentro del baño por los horrendos sonidos que salen desde allí. Por supuesto, también hay quienes tienen una maravillosa voz, bien afinada, pero ellos son más la excepción que la regla.
Sin tomar en cuenta lo que opinen los demás, para los que estamos cantando en la ducha nuestros sonidos (gritos) se oyen perfectamente bien. Cerramos los ojos y nos imaginamos en la tarima frente a una gran multitud de personas o quizás en un programa visto a nivel mundial como <<La Voz>>, donde tendríamos la oportunidad de dar a conocer nuestro talento vocal.
Productos de mis propias experiencias <<cantando en la ducha>>, algunas reflexiones :
1) ¿Realmente cantamos mejor en la ducha?
Tal vez sea mera ilusión o tenga algo que ver con la acústica en ese lugar. Tal vez es esto lo que nos da la impresión que cantamos como uno de los mejores. Pero dejando el tema de la acústica a un lado, parece ser que otra razón del porque es porque comúnmente estamos solos en la ducha. Como solemos estar solos ahí, no hay nadie que nos juzgue, diga o exprese su opinión. Una cosa me lleva a pensar otra, y cabe preguntar:
¿Si nadie nos juzgara en nuestro trabajo, y en la vida, de qué seríamos capaz?
¿Seríamos más desinhibidos y atrevidos, como ocurre cuando cantamos en la ducha?
2) ¿Exactamente en qué consiste hacer algo de forma correcta, ya sea cantar, bailar o cualquier otra actividad? ¿No tiene que ver sencillamente con disfrutarlo?
Siempre me ha parecido interesante que hay una manera <<correcta>> de bailar Salsa, pero cuando se trata de bailar Rock and Roll, todo cuadra. Tal vez la razón es porque para los que bailan Salsa, bailan para los demás; mientras que los que bailan Rock and Roll, bailan por ellos mismos, por la buena sensación, y sin otra intención.
3) Si queremos cantar profesionalmente, y no solamente hacerlo por placer, es importante buscar alguien que nos oriente y ayude a desarrollar nuestra voz. Debemos buscar expertos quienes nos puedan dar consejos y dirección. Cierra tus ojos por un momento e imagina:
¿Cómo sería tu desempeño si pensaras y actuaras como lo hacen los mejores?
Como reflexión final, todos tenemos un don para hacer algo. Más importante que el don que tenemos es compartirlo con otros, y así ser actores, en vez de espectadores, en nuestro propio teatro de vida. Bailemos como si nadie nos estuviera viendo y cantemos para sentirnos felices, porque al final, no es tan importante cantar y bailar bien, sino cantar y bailar para sentirnos bien.
∞ Rob McBride ∞
LL IV 7