Por mucho tiempo a lo largo de mi vida, he amado la Ley Natural, que yo lo veo como no más que el orden establecido por el universo y la naturaleza. Sin embargo, estoy llegando a pensar que la Ley del Hombre, también nos ofrece un gran beneficio, ya que determina el orden en un mundo que a menudo se desarrolla de manera desordenada.
En el caso de Venezuela, el país donde vivo desde hace muchos años, la situación actual me ha permitido darme cuenta que la ley que predomina en la actualidad en este país, es la Ley Natural. Lo que se observa no es tan agradable. La ley que me había parecido tan linda y bonita, de repente ya no me resulta tan noble.
Para explicar un poco más mi punto, veamos algunas diferencias entra la Ley Natural y la Ley del Hombre:
- La Ley del Hombre busca protegerse contra tal tipo de calamidad
- La Ley Natural arrasa con una población entera en un catástrofe sin pestañear
- La Ley Natural condena y ejecuta sin juicio, y sin piedad
- La Ley del Hombre considera y pondera antes de enjuiciar
- La Ley Natural permite que el más fuerte tomar la tajada más grande
- La Ley del Hombre busca dividir todo más o menos por igual
- La Ley Natural exige que estemos siempre atentos al peligro
- La Ley del Hombre nos permite vivir en paz y tranquilidad
Vale la pena preguntarnos entonces:
¿Cuál de las dos Leyes preferimos, la Ley Natural o la Ley del Hombre?
Mientras que reconozco que la Ley Natural, eventualmente tomará su curso, agradezco mucho que exista la Ley del Hombre, la cual nos permite buscar un camino hacia la paz y tranquilidad, en un mundo en el que se rige la agresividad y el ruido.
El río seguirá su cauce y el mundo seguirá dando vueltas. Mientras eso ocurre, lo nuestro es buscar y encontrar el sentido, a lo que frecuentemente no parece tenerlo.
Si me hubieses preguntado ayer:
—Rob, ¿cuál camino prefieres, el que sigue la Ley Natural o la Ley del Hombre?”
Hubiese respondido sin titubear —¡La Ley Natural por supuesto!
Ahora, después de analizar estas dos leyes desde varios puntos de vista para escribir este Lunar Letter, tengo otra perspectiva, otra idea sobre lo que podría ser un mejor camino. Muchas veces, nuestras emociones, como también nuestros propios miedos y nuestras dudas, son generadas por una batalla interna entre lo que “debemos” hacer, de acuerdo a la formación recibida; y lo que realmente “sentimos” que debemos hacer en la profundidad de nuestro ser.
Debemos estar siempre conscientes de lo que la Ley Natural nos puede lleva a hacer. Cuando menos lo esperamos, puede dar inicio a nuestros instintos más básicos y cuando esto es el caso, no somos más que simples animales.
Mi recomendación es muy sencillo, pero no tan fácil. Seamos parte de la solución en vez del problema, mostrando respecto tanto para la Ley Natural, como también por la del Hombre, y así llegar a vivir en una sociedad donde reina la paz y la tranquilidad son la orden del día, con armonía entre el hombre y la naturaleza; en vez del odio y de la hostilidad que se experimenta tanto en la actualidad.
∞ Rob McBride ∞
LL IV 11