Todos poseemos una mente mágica con una imaginación increíble. Todo comienza en la mente. Todo lo que tenemos y sabemos hoy fue en alguna oportunidad una mera semilla de un pensamiento. Napoleon Hill dijo:
“Lo que la mente pueda concebir y creer, puede alcanzar.”
Cuando miramos a nuestro alrededor, vemos que los pensamientos efectivamente se convierten en realidades. Mientras meditamos sobre nuestras posibilidades, ayuda reflexionar sobre las investigaciones del Dr. Maxwell Maltz. Él descubrió que la mente no puede diferenciar entre algo real y algo imaginado intensamente.
Una viva imaginación puede precisar nuevos caminos a distintos destinos.
Una viva imaginación puede llevarnos a diferentes espacios en lugares lejanos.
Una viva imaginación puede crear nuevas verdades ante creencias preconcebidas.
Una viva imaginación puede generar distintas respuestas para desafíos cotidianos.
Una viva imaginación puede aliviar dolores punzantes en circunstancias incómodas.
Una viva imaginación puede plantar la semilla de un pensamiento para nuevas posibilidades.
Una viva imaginación puede permitirnos experimentar éxtasis existencial.
Una viva imaginación puede originar ideas serenas en tiempos turbulentos.
Una viva imaginación puede construir una fortaleza de paz y serenidad.
Una viva imaginación puede dar pie para alcanzar la excelencia.
Cuando permitimos dar vuelo a nuestra imaginación, ampliamos nuestras propias posibilidades y comenzamos a aprovechar nuestro verdadero potencial.
Durante tanto tiempo nos han dicho: “¡No puedes hacer eso!” y “¡Ni lo pienses!”. Como consecuencia, hemos sido condicionados a rechazar nuevas ideas y dejar de lado nuestra imaginación.
Nuestra mente crea nuestra propia realidad. Si queremos cambiar nuestras circunstancias, simplemente debemos cambiar nuestros pensamientos. Potenciando el pensamiento creativo y la viva imaginación es el primer paso para crear las experiencias y la vida que deseamos.
∞ Rob McBride ∞
LL II 34