My Buddy Billy

Some called him daddy, others husband, uncle, boss, co-worker, friend, godfather, or buddy.

For me, he was my Buddy Billy…

He was one of the first to greet me upon my arrival to Caracas
He was the one who was always there when I needed him
He was one of the few people who kept his word
He was one to always want to be on time

Now that my Buddy Billy is no longer in the same physical space as we are, it seems somehow he hasn’t actually left us, the fortunate who remain.

Fortunate to have known a person who, while not perfect, was a role model worthy of following in our own journey. For those of us who knew him, we would marvel with his wit to identify and express what was going on in a few words.

So many beautiful times with him and his family bring a smile to my face. Trips to the beach, to the mountains, and much more. Happy moments like birthdays, graduations, weddings, and too difficult times like death and other complications. My Buddy Billy was always there with just the right thing to say with a devilish look in his eye or an overall demeanor of complicity.

When he walked along the street, he greeted people kindly, respecting each regardless of his station in life. He talked to those of high rank and also to those of the lowest. If he had something to say, he would say it, and then let the other interpret the meaning as they pleased.

My Buddy Billy worked hard and earned the respect of those with whom he interacted, as much with his bosses as with those he was responsible for, which were at times many. He maintained order in chaos directing his team of workers much as the notable Dudamel directs a great orchestra.

My Buddy Billy looked nice and was very careful with his appearance, though he also know how to let his hair down when the situation was right to rest and relax, going from being formal to comfortable with ease. He felt at home just about anywhere.

He was astute and did business negotiations easily. While surely some didn’t go as he expected, usually it seems as if they did. Nevertheless, the constant weight of making ends meet in a situation which was constantly deteriorating was perhaps the beginning of his end.

I remember sharing many things with my Buddy Billy, among them:

Going by boat to the Keys in Morrocoy
Traveling through the Pampas of Argentina
Skiing through the Rocky Mountains of Colorado
Sitting at home watching just about any kind of sporting event
Going up to the Avila for a pork sandwich or perhaps heading to the other side
Being lost in the city and calling him, so he could help me find my way
Resolving problems with him, because it was his specialty
Playing tennis almost every Sunday in the park
Being together during important times
Passing time just about anywhere

While there are many ways to remember someone when they leave this reality we know to another yet unknown, I choose to remember my Buddy Billy’s wonderful qualities that made him so special to so many of us.

RIP it my friend!

∞ Rob McBride ∞
20 Feb 2020

El Gran Guille

Algunos lo llamaban papá, otros esposo, tío, jefe, compañero, amigo, padrino o pana.

Para mí, era ¡mi gran pana Guille!

Él fue una de las primeras personas que me recibieron en Caracas
Él fue quien siempre estaba ahí cuando lo necesitaba
Él fue de los pocos que cumplía con su palabra
Él fue de los que quería llegar a tiempo

Ahora que el Gran Guille no está en el plano físico con nosotros, me parece que él aún no se ha ido del todo de los afortunados que nos quedamos.

Afortunados de haber conocido a una persona, que si bien no era perfecta, fue un ejemplo digno de seguir. Para quienes le conocimos, no dejaba de asombrarnos la “chispa” que tenía para identificar y expresar lo que ocurría en un determinado instante en pocas palabras.

Fueron tantos buenos momentos con él y su familia, que recordarlo me dibuja una sonrisa en el rostro. Los viajes a la playa, a la montaña y más allá. Momentos de felicidad como fueron cumpleaños, graduaciones y las bodas, así también los momentos difíciles, tales como la llegada de la muerte y otras situaciones complicadas. El Gran Guille estaba ahí siempre listo con unas palabras acertadas, una sonrisa de picardía o un gesto de complicidad.

Cuando caminaba por la calle, saludaba a la gente con gentileza, respetando a cada quien independiente de su estrato social. Podía conversar con las personas de una posición alta y de la misma manera con los que no tenían techo. Si tenía algo que decir, lo decía y ya, dejando que el otro interpretara su mensaje como mejor le pareciera.

El Gran Guille trabajaba bien y se ganó el respeto de aquellos con quienes interactuaba, tanto por parte de sus jefes, como también de los quien estaban bajo su mando, que en momentos eran muchos. Él logró mantener el orden dentro del caos dirigiendo a su equipo de trabajo, tal como el notable Dudamel dirige una gran orquesta.

El Gran Guille se vestía bien y era muy cuidadoso con su apariencia, aunque también sabía ponerse cómodo y relajado dependiendo del lugar, pasando de la formalidad a la comodidad con facilidad. Era un hombre que se sentía en casa en casi cualquier lugar.

Era astuto y hacía los negocios fácilmente. Aunque seguramente en uno que otro no obtuvo la ganancia esperada, en la mayoría de los casos parece que el resultado era positivo. Sin embargo, la carga constante que implicaba cuadrar las cuentas y su lucha contra una situación cada vez más difícil, fue quizás el inicio de su final.

Puedo recordar con gratitud el haber compartido muchas cosas con el Gran Guille, entre ellas:

Viajar en lancha a los Cayos de Morrocoy
Pasear por las grandes Pampas de Argentina
Esquiar en las Montañas Rocallosas de Colorado
Estar sentado en casa viendo cualquier deporte en la tele
Ir al Ávila para comer un sanduche de pernil o quizás ir a otro lado
Estar perdido la ciudad, y llamarlo porque sabía que él sabía la vía correcta
Jugar un partido de tenis casi todos los domingos en el parque
Resolver problemas con él porque era su especialidad
Estar juntos en momentos importantes
Pasar ratos juntos donde sea

Mientras que hay muchas diferentes maneras de recordar a una persona cuando se ha ido de esta realidad ya conocida por nosotros hacia otra aún desconocida. Elijo recordar las excelentes calidades del Gran Guille que lo hacía tan especial para tantos de nosotros.

¡QEPD mi pana!

∞ Rob McBride ∞
20 Feb 2020

Uno por Uno

Uno por uno entramos en el mundo
Poco a poco se va revelando su secreto

Dos personas van agarrados de la mano
Dibujando en la arena un dulce sueño

Juntos el resultado suele ser otro ser
Pronto mamá y papá tienen otro deber

El nuevo bebé abre los ojos de repente
Y la emoción que trae consigo es evidente

Al ver el pequeño ponderamos la vida
Y al verlo es evidente y hay poca duda

Cuando pensamos en el significado de la vida
Vemos que crear otra vida es parte de la respuesta

∞ Rob McBride ∞
26 Nov 2019