Semillas del Éxito / Construir 🏢

La vida que construimos depende en gran parte de la confianza en nosotros mismos que tenemos. Confía en tus habilidades para crear más oportunidades.

∞ Rob McBride ∞
SE VIII v 1

Seeds of Success / Construct 🚧

The life we construct depends in great part on our confidence in ourselves. Have confidence in your abilities to create opportunities.

∞ Rob McBride ∞
SS VIII v 1

Lunar Letter / Nothing to Lose

It’s common to spend much of life accumulating material things and emotional experiences. It’s normal and a result of human nature, as well as marketing campaigns. The dream of many is to have their own home in a nice place, a new car, comfortable well styled furniture, designer clothes, and of course, the latest technology to manage it all.

We to out daily into to the world sharing our talents to acquire what we see on television, in popular magazines and the billboards that shout with their offers:

“This is the life you deserve!”

To sum it up, we go after what we are offered in so many places. Additionally, we want to be accepted socially by everyone. We should be good children, students, parents, and colleagues. We act in accordance with established norms for “living right.” We say, “hello” and “goodbye,” ask for something by saying, “please” and receive it with a “thank you.” We have the script memorized.

What if we had none of this?

What if having your own home, car, and other toys, were no longer so important?

What if instead of being like a monkey in a circus looking for applause, you simply be the best you that you can be?

We think the applause and approval from someone else will satisfy us. We look for recognition and they tell us we are “good”, not really because we are but rather to be up to the demands. We receive the medal they give as a prize and with it pretend we are fulfilled.

Why are we so afraid of losing what we have already acquired?

Think for a moment of those who have left their countries throughout history in search of a better life, as many are doing worldwide right now. While some are able to move everything, others take what they can, often losing much of it on the way, ending up with the clothes on their back. Then, there is nothing to lose.

To these last brave souls, who travel with almost nothing at all, does it matter what they must leave behind? Of course it hurts! but they are convinced something greater lies ahead for them on the horizon. In a few words, they have nothing to lose.

Leaving a country or place is a good example of how someone can get to the feeling of having nothing to lose, but it also applies to all areas of life: work, relations, and others.

What would you do if you had nothing to lose?

Would you do what you are doing right now or would you do something else?

Would you stay with the same people in your environment or would you fire them in favor of others?

What are you afraid of losing?

Today can be a new start. You can begin a new chapter in your history of life, leaving behind the weight of those already written. This can be the day when you finally free yourself of everything weighing you down to travel lighter and fly higher. We convince ourselves we need many “things” to live, but the reality is that we need very little. With a worthy purpose in mind, there is nothing you have today which cannot be replaced at some point, and perhaps you in time, it really wasn’t necessary after all.

When there is nothing more to hang onto, nothing weighs you down, and there is nothing you have to drag along with you; you are left only with who you are and the world you want to conquer.

Lunar Letter / Nada Que Perder

Es común utilizar una gran cantidad de la vida acumulando cosas materiales y hasta experiencias emocionales. Es algo normal que suceda como resultado de la naturaleza propia del ser humano, así como también de los planes de mercadeo. El sueño de muchos es tener una vivienda propia en un buen lugar, un carro de último modelo, muebles cómodos de buen gusto, ropa de marca y por supuesto la última tecnología para manejarlo todo.

Salimos al mundo, compartiendo nuestros dones para adquirir lo que vemos en la televisión, en las revistas de farándula y en las vallas que gritan con sus ofertas:

¡Está es la vida feliz que te mereces!

En fin, vamos en búsqueda de aquél que nos ofrecen por todos lados. Adicionalmente, queremos ser aceptados socialmente por todos. Debemos ser: buenos hijos, estudiantes, padres y compañeros. Actuamos de acuerdo a normas establecidas para el “buen vivir”. Para saludar decimos: “hola”, para despedir: “adiós”, pedimos algo diciendo “por favor” y lo recibimos con un “gracias”. Tenemos todo el libreto aprendido.

¿Pero qué tal si no tuvieras que tener nada de eso?

¿Qué tal si poseer una vivienda propia, un auto, y todos los demás juguetes ya no fueran la razón de tu vida?

¿Qué tal si en vez de ser como un payaso en un circo que busca aplausos, simplemente fueras el mejor tú posible?

Pensamos que el aplauso o aprobación de alguien más, nos va a llenar. Buscamos el reconocimiento y que nos llamen “buenos” no porque realmente lo seamos, sino por estar “a la altura” de las exigencias, entonces obtenemos la medalla de aceptado que nos dan, y con eso pretendemos que estamos completos.

¿Por qué tememos tanto perder lo que ya hemos adquirido?

Piensa por un momento en todos aquellos que han salido de sus países para un mejor futuro, como es el caso en la actualidad en muchas partes del mundo. No todos los que pueden cargar con el total de sus pertenencias al momento de hacerlo. Muchos logran ir con algo, pero pierden parte o la totalidad del equipaje en el trayecto, quedándose solamente con lo que llevan puesto. Entonces no hay nada que perder.

A éstos almas valientes, que viajan casi sin equipaje ¿les importa lo que tienen que dejar? ¡Por supuesto que sí les duele! pero están convencidos que algo mejor les espera a donde llegarán. En pocas palabras, no tienen nada que perder.

El dejar un país o un lugar es buen ejemplo de llegar a la sensación de nada que perder, sin embargo también aplica a todos los ámbitos de la vida: trabajo, relaciones, entre otras.

¿Qué harías si no tuvieras nada que perder?

¿Seguirías haciendo lo mismo o harías algo diferente?

¿Te mantendrás con las mismas personas en tu entorno o las sustituirías por otras?

¿Qué temes perder?

Hoy puede ser un nuevo comienzo. Puedes comenzar un nuevo capítulo en tu historia de vida, dejando atrás el peso de los anteriores. Puede ser que este sea el día en el que al fin deshagas de todo lo que te pesa para ir más ligero y volar más alto. Nos convencemos que necesitamos muchas “cosas” para vivir, pero en realidad, necesitamos muy poco. Con un propósito digno en mente, no hay nada que tengas hoy en día de lo que no te puedas desprender, y con el tiempo, quizás entiendas que no había razón para seguir amarado a ello.

Cuando ya no hay nada a que aferrarte, no tienes nada que perder, nada te pesa, nada que debas arrastrar; solo quedas tu con lo que eres, y el mundo que quieras conquistar.