Algo mágico pasa cuando establecemos una meta. Nuestra mente vuela con la imaginación de lo que podría ser nuestra realidad en el futuro. Piénsalo por un minuto. Todo lo que tenemos en este instante fue en algún momento un deseo o un pensamiento.
“Eres hoy lo que tus pensamientos te han traído; estarás mañana dónde tus pensamientos te lleven.” ~ James Allen
Aunque a veces pensamos que no “tenemos” tantas cosas, la realidad es que tenemos mucho. A nivel material, absolutamente todo de valor primero fue una idea. Queríamos una bicicleta y comenzamos a hablar de tener una y soñarla. Con el tiempo y a veces con mucha perseverancia hemos adquirido muchas cosas. Otras han sido más elusivas.
A nivel emocional también es cierto. Todo lo que hemos anhelado a nivel emocional, primero fue un objetivo. Aunque el amor de nuestros padres vino incondicionalmente sin que lo pidiéramos, no es así con las demás personas. Nuestros deseos y nuestros esfuerzos han creado las relaciones que tenemos hoy. Queríamos conocer a alguien e hicimos todo lo posible para estar cerca de ellos. ¡Aunque no siempre resultaba como queríamos!
Ahora piensa en todas las cosas que no tienes y que jamás has pensado tener. ¡La lista es larga! Lo más interesante es que sin primero haberlo pensado y deseado, es imposible tenerlo. Esto no significa que si pensamos tener un helicóptero automáticamente lo vamos a tener, pero las probabilidades de adquirir uno serán más grandes si primero sembramos la idea en nuestra mente. Por ejemplo, podemos acercar lo imaginario a lo que podría ser real, trazando en nuestras mentes el dibujo del modelo y color de helicóptero que quisiéramos tener.
En vez de ser tacaño y “pichirre” con nuestros deseos, vamos a abrir nuestra mente a todas las posibilidades que ofrece la vida.
¿Cómo hace una persona para comprar una isla?
¿Cómo hace otra persona para encontrar su alma gemela?
Las personas que han comprado una isla primero se lo propusieron, luego investigaron cuáles islas estaban disponibles y finalmente cuál era el proceso para lograrlo. Las personas que han encontrado sus almas gemelas primero sembraron ese deseo, luego hicieron un inventario mental o escrito de las características que buscaban en una persona. En ambos casos los dos luego tomaron acción para lograr lo que más deseaban.
“Si lo puedes soñar, lo puedes hacer.” ~ Walt Disney
Absolutamente todo comienza en nuestra imaginación y esa es la magia de las metas. No es posible tener algo que nunca hemos soñado tener. Después de tener nuestro objetivo nítido y preciso en nuestra mente podemos comenzar a trabajar diligentemente todos los días con atrevimiento, pasión y empuje. Con tiempo y tenacidad haremos realidad lo que nos ha propuesto nuestra imaginación. Lo que nos atrevemos a soñar es más fácil lograr.
∞ Rob McBride ∞
LL II 49